La esperanza es lo último que se pierde
Por Daniela Ramos, profesora de enseñanza primaria.-
Pandora fue la primera mujer hecha a imagen y semejanza de los mortales. Hefesto, el dios del fuego, ayudó a ello junto a Atenea. Dicen que dicen que Pandora fue moldeada en arcilla (algo similar a Eva) y cada uno de los dioses le otorgó una virtud particular. Afrodita le dio el don de la gracia, Atenea, la sabiduría; Apolo, la música; Hermes, la seducción. Zeus fue el dios que instruyó a los anteriores en la creación de tal hermosa mujer.
El mito griego de la caja de Pandora tiene su origen en el instante en que Zeus le entrega una caja, la cual debía llegar a manos de Epimeteo (es el dios de las excusas y la retrospectiva). Dentro de ella estaban acumulados todos los males de la humanidad para los griegos: la fatiga, la enfermedad, la locura, el vicio, el crimen, la vejez, la pasión y la tristeza.
Esa caja era en verdad una ánfora o jarra y por un error de traducción quedó como una caja. Epitemeo, hermano de Prometeo (aquel titán audaz que desafió a Zeus y creó a los hombres dándoles sabiduría) al verla tan bella la desposó. En realidad Zeus se estaba vengando de Prometeo a través suyo. Por ello Pandora no llegó con las manos vacías, trajo consigo la caja.
Hay diversas versiones de este mito griego que apuntan a un recipiente que no sólo contenía males en su interior. Al parecer también alojaba virtudes. Lo cual parece apoyarse en el propio nombre de la dama en cuestión, Pandora (pan “todo” y doron “regalo”).
Según Homero (se le atribuye la autoría de la Ilíada y la Odisea, su nacimiento data del siglo VII a C. aproximadamente) al llegar a su nuevo hogar la curiosidad le jugó una mala pasada y para colmo abrió la caja con los peores males posibles. Otros autores creen que allí se encontraban virtudes y desgracias por igual y Pandora vio como se difuminaban las guerras, la ira, el sufrimiento y el vacío era total. Sin embargo la esperanza había quedado inmóvil en un rincón. Un rayo de luz en medio de la oscuridad.
Por un lado podemos decir que la curiosidad de Pandora desató los males del mundo y ellos se instalaron tranquilamente en él, a pesar de ello la esperanza hizo que en medio del caos la adecuación de los aprendizajes y nuevos comportamientos surgieran.
La oportunidad y el descubrimiento dejaron de lado la crisis del impacto inicial, dando lugar a la creatividad.Ese regalo de bodas de Zeus, el cual no debía abrirse, trajo consigo los males que los dioses habían reservado para los mortales, pero también traían la esperanza. Vaya uno a saber por qué estaba ella ahí junto a los demás. Sólo podemos decir con certeza “que la esperanza es lo último que se pierde”, quizás ganó la partida porque se ocultó en ese aislado rincón de la caja